Maratón Riberas del Mapocho (Santiago 21K)

Me imagino que los organizadores decidieron ponerle Santiago 21K a esta carrera debido a que el Río Mapocho tiene cualquier cosa menos atractivo turístico. Sería como si alguna carrera en Caracas llevara al Río Guaire en su nombre.

Sin embargo, este nombre me parece más ajustado. La carrera iniciaba en el Parque Forestal en la avenida José María Caro seguía por la Avenida Santa María y retornaba por la avenida Andrés Bello hasta el punto de partida. Dos vueltas para los que escogimos la media Maratón. Para los que conocen Santiago, se darán cuenta que se trata de un circuito alrededor del mencionado rio.

Cabe destacar que habiendo medido el circuito a través de MapMyRun daba un total de 19,7 Kilómetros lo cual en parte fue un alivio considerando los problemas que había tenido en la preparación. (Y vaya que lo fue)

Habiendo anunciado la partida a las 9:00 am llegué acompañado de mi esposa media hora antes. para calentar un poquito e ir por última vez al baño antes de partir. Los baños, los baños.. ¿Donde están los baños? No hay baños. Alguien dijo que estarían habilitados los del museo. Al final me toco hacer como los animales en un lugar lejos de la mirada de los curiosos. Para los caballeros está bien, pero a las damas se les debió complicar bastante la cosa.

Luego de varios minutos de retraso, se dio la partida. Arranqué al final del pelotón a un ritmo que yo consideraría lento pero que me permitía pasar gente desde el inicio. Normalmente se trata de los corredores de 5K y algunos de 10K que les encanta salir de primeros para luego hacer tiempos superiores a una hora.

Un carril de la calle solo para nosotros, conos de seguridad, control del tránsito por Carabineros y banderilleros bastante aburridos marcaban nuestra ruta. Tras cruzar el puente La Paz, se iniciaba una pendiente de alrededor del 1% constante hasta el puente Suecia. A partir de allí solo bajada hasta llegar nuevamente al punto de partida.

Me sentí bastante cómodo en la primera vuelta la cual traté de hacer lentamente tratando de reservar fuerzas para el final.

Al pasar por el kilómetro 14 la lesión de mi rodilla derecha aparece para hacerme la vida imposible. No obstante, ya estaba allí en la competencia y por orgullo no podía abandonar. Abandonando o llegando a la meta iba a sufrir las consecuencias.

Faltando 3 kilómetros, por primera vez alguien me rebasa, y lo hace a una velocidad bastante destacable. Una velocidad que el dolor no me dejaría obtener a pesar de las ganas y la voluntad que tenía. Acto seguido un pinchazo en la pantorrilla izquierda presagiando un calambre me hace darme cuenta que no debo acelerar.

Haciendo de tripas corazón mantuve el ritmo y pasando por la Plaza Italia ZZAZZZZZZZ
Un pinchazo en la pantorrilla derecha más fuerte que el anterior. Restando 700 metros y par de calambres haciéndome la vida imposible.

Lo único que en ese momento me hizo seguir fue divisar a lo lejos el arco de la meta. No pude hacer esprint. No pude rematar. Me tuve que conformar con terminar y ver como 5 corredores me rebasaban en los 100 metros finales...

Cruce la meta y a partir de allí... A cojear se ha dicho. ¿A cojear de las dos piernas? Imposible... Me alcanzó mi esposa y con su ayuda llegué a un jardín a tratar de recuperar y estirar.

Extenuado, por un esfuerzo al cual ese día no estaba preparado para afrontar sumado a dos calambres y la reaparición del dolor de la rodilla para cualquiera pudiese sonar a fracaso..

El reloj, no he visto el reloj. Mi marca 1:46:30!!! Guaooo!! A pesar de todo una marca increíble a pesar de que el circuito estaba mal medido.

Incluso, sumando 7 minutos a la marca considerando la distancia restante es mi mejor tiempo en carreras de esta duración..

Así que lesionado, acalambrado, con falta de preparación y bajas expectativas, pude superarme y darle un excelente colofón a los que fue un año 2010 grande. Un año que me permitió darme cuenta que las barreras solo están en la cabeza de cada uno, que no existen límites que no se puedan derribar y que siempre se puede llegar más lejos de lo que cualquiera puede imaginar...

Ahora descanso, reposo y mucha paciencia, que muchos retos nuevas experiencias están por venir. Apúrate 2011... que voy por ti...