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miércoles, 5 de septiembre de 2018

Maratón de La Ciudad de México

Ciudad de México! Lugar cargado de estigmas. La más poblada, la más contaminada, tráfico infernal, altura sobre los 2.200 msnm y un largo etc.

Porque venir a correr acá? Tiene un maratón de clase mundial, el más importante de América Latina y con etiqueta de plata de la IAAF.

Veamos la experiencia...

Expo

El lugar elegido es la zona de pits del autódromo hermanos Rodríguez. Una moderna y gigante infraestructura nos da la bienvenida con todo lo que podemos buscar.

Un pabellón dedicado a otras maratones tales como Monterrey, San José, Praga, incluso Santiago se dan cita, exhibiendo sus mejores galas buscando convencer de dónde correr el siguiente.
 Foodtrucks, tiendas deportivas de todo el espectro, galería de ediciones anteriores, 
Muro de nombres y un lugar de entrega de Kits gigante. Stands cada 500 dorsales, así que bien difícil hacer fila.


Metro al lado, así que una gran expo! 7/7 puntos

Transporte

El metro de la ciudad abrió todas sus líneas a las 5:00 siendo gratuito mostrando el dorsal en los torniquetes. Mi viaje fue de 7 estaciones y repleto como en hora peak. 6,5/7 puntos

Corrales o Cajones

Diferenciados por la marca indicada al momento de la inscripción y por color el cual se porta en una pulsera en la muñeca requisito para acceder.

Acceder?  Prácticamente imposible! El espacio insuficiente y el acceso pésimo.La partida de mi cajón salió 10 minutos después de lo previsto y una vez dentro "pulseras de todos colores". Mucha música, animación y gran ambiente para entrar en calor. 4/7 puntos.

Ruta

Es un recorrido muy panorámico. Parte en la catedral en pleno zócalo de la capital junto al palacio de gobierno.


Por el paseo de la reforma podrás ver múltiples hitos de la ciudad como el monumento a la independencia.

Igualmente, podrás ver el museo Soumaya ícono arquitectónico del sector de Polanco.

Parte de la ruta se inmersa en el bosque de Chapultepec con mucho verde y sombra. (Humedad también)

La altimetria en principio no se ve complicada. Se parte con 10 km con una leve bajada para luego tener desniveles alternados hasta el kilometro 30. A partir de allí es una subida suave pero constante hasta el final sin embargo a estas alturas de la carrera la piernas sentirán el esfuerzo.

Entrada por la puerta del maratón del estadio olímpico por una bajada super pronunciada perfecta para morder el polvo. Precaución!!

Una vez en el túnel música ensordecedora y luces de neón te indican que se viene lo bueno.

Entrada al estadio, pista atlética, pebetero encendido, tribunas a reventar y llegada con brazos en alto. 7/7 Puntos

https://www.relive.cc/view/1799626921


Servicios en Ruta, seguridad y animación

Se ofrecia agua cada 2,5 km e isotónica cada 5 km. Sin embargo, desde la calle lo noté no tan preciso y algo más relajado. El agua estaba embolsada en plástico lo cual era incómodo, difícil de beber y con alto desperdicio. Plástico....

La nota positiva es que habían grandes contenedores para los desechos y personal para recoger todo. Incluso a la cola del último pelotón máquinas barredoras y lavadoras iban dejando la calle cómo si nada hubiese pasado. 6/7

El recorrido se encontraba cerrado en su totalidad contando con vallas papales en más de un 90%. Totalmente seguro, ningún cruce peligroso y ningún auto atorado esperando para pasar.

La animación sencillamente INCREÍBLE!!

Gente de lado y lado, pancartas, gritos, charros, mariachis, luchadores, chapulines, matracas, vuvuzelas...

Y cuánto ruido se te ocurra. Seguro uno de los maratones más escandalosos del mundo.

Km a km los mexicanos viven y disfrutan su maratón. 7/7 se queda corto.

Tangibles

Kit: Enorme. Verdaderos regalos de los patrocinadores. Barras energéticas, geles e incluso dos cajas de Bedoyecta. El dorsal hermoso. Full color, sello de autenticidad y personalizado. 7/7

Polera: El mismo "event tee" Adidas de siempre con talla sobredimensionada. Ni un brillo. 3/7



Medalla: Letra "O" Conmemorativa. Si corriste los últimos años con esta edición completabas la palabra MÉXICO. Pesada, elaborada en Zamak con muy mala terminación. Cinta estampada por un solo lado. 4/7

Llegada: Poca fruta. Una botella de gatorade. Mantas térmicas (Con 25°C?) Y una toalla con la palabra Finisher. 4/7

Fotos de llegada: Pésimas. La cámara a la altura de la pista, lo cual sumado a la aglomeración a la llegada solo tienes un montón de gente que ni siquiera el reloj se ve.
1/7

Post. Sin lugar adecuado para recuperar. Gente tirada en el concreto o en la calle y sol incandescente. El lugar de llegada muy alejado. Sin metro cercano. Tráfico infernal. 1/7

Epílogo.

No es chiste que los mexicanos viven su maratón. Al final después de más de una hora pude encontrar a mi familia (Venezolanos, Chilenos, Mexicanos y una Brasileña en el combo) después nos fuimos a almorzar y yo aún con la ropa de carrera y mi medalla al cuello. Dentro del restaurant un pequeño parque infantil al que la Siena insiste en ir. Una vez allí se me acerca una niña y me dice "usted corrió la maratón? Waooooooooo"

Sin querer y sin saber puede inspirar a cualquiera. Lo que para unos es rutinario se hace extraordinario para otros. Es la magia del maratón.












lunes, 27 de agosto de 2018

El Peor Maratón

Todos aquellos que hemos hecho del maratón un estilo de vida, tenemos en el registro esa carrera de mierda que nos hizo sufrir más de la cuenta. Esa lucha interna para poder terminar o para muchos(incluso profesionales) contemplar el abandono y el infame DNF.

El detalle es que este trajinar por meses de kilometraje elevado no es estático. Al contrario, posee una dinámica qué si nuestra soberbia de corredor pasa por alto puede traer resultados catástroficos.

Qué quiere decir esto? Que el peor maratón siempre está por venir...

Una buena preparación no necesariamente garantiza el resultado. Un resfrío, un malestar estomacal o la reaparición de una lesión vieja (o nueva) dos semanas antes puede tirar todo por la borda. 

En casi diez años corriendo, he completado 6 maratones de los cuáles solo 2 han sido de manera satisfactoria. Mirando en retrospectiva la pregunta es: Vale verdaderamente la pena eso de "terminar como sea"?

Al estar atrapado en una mala carrera aparecen los estigmas "El dolor es pasajero, la gloria es para siempre" o "los primeros 30 se corren con las piernas el resto con el corazón" cuyo incentivo está más relacionado con la vergüenza del abandono.
 
En mi opinión vale la pena en función de que asimiles los aprendizajes adquiridos de manera que te permitan poder tener una mejor versión de ti mismo y desarrollar la madurez suficiente para tener un manejo correcto de las expectativas y la recuperación necesaria antes de intentarlo de nuevo.

El peor maratón no pasa y ya. Siempre está a la vuelta de la esquina.






lunes, 9 de abril de 2018

Meta sin sentido. (o como hacer una buena carrera y terminar choreado)

Participar en la mds, la gran fiesta deportiva de la ciudad se ha convertido en una tradición y casi un deber para mi como corredor.

Para un coleccionista como  yo perders lo que representa quizá la medalla más esmerada de Chile es inaceptable, lo que me ha llevado a estar presente en 7 veces en los últimos 8 años.

Este año como nunca antes llegué solo para participar ya que he estado lesionado y no he tenido el tiempo para dedicarle al entrenamiento como hace un año.

Llegó la semana de la maratón y tuve que combinar mi trabajo en la exporunning con una gastroenteritis viral que me tuvo con licencia y al borde de la deshidratación.

Aún así, por algún motivo que no tengo claro me fijé la meta de bajar el medio maratón de 1:50.

Esta meta no tiene ningún asidero. En primer lugar mi mejor marca en la distancia es 1:36(Scotiabank 2017) y en segundo término todo lo ocurrido en la previa era suficiente para tomarselo com más calma.

Así pues, llegó el día. Calenté, encajoné y partí.

Fiel a mi plan parti conservador. Luego después del segundo kilómetro todo el camino adelantando gente.

Bueno parciales alrededor de 5:10 aprovechando tramos fáciles y siendo recatado en los díficiles.

Llegan los tres kilómetros finales y acelero. Nunca habia bajado por ese circuito a menos de 4:50.

Meta a la vista que cruzo en 1:51!!!

Gran carrera!!

Pero no...

Sufro mucho en la segunda mitad. Molestias en la banda y reaparecen mis dolores en el talón.

Más encima ni logro la meta absurda de bajar de 1:50 por un minuto apenas.

Llego al punto de encuentro aburrido, choreado y muy pesimista.

Terrible. Todo por una mala elección. Un descriterio o despropósito.

Lo que pudo ser una gran carrera, con puro corazón y piernas se convirtió en una pesadilla que me tendrá pensativo por un rato.

Se me viene muy de cerca el inicio de mi quinta decada. Tiempo para repensar y reflexionar. Tiempo de cambiar de categoría y que todo lo que venga, pase lo que pase, se convierta en nuevas marcas personales.

Solo espero madurar como corredor y no fijarme metas sin sentido.