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domingo, 28 de marzo de 2010

Junquito Rock!!

El día de hoy tenía pensado participar en la carrera 12 k del aniversario del 23 de enero en Caracas.

Sin embargo, no me gustó la forma en que los organizadores me remitieron la información (Información? es un insulto para esa palabra) así que decliné de mis intenciones.

No obstante, decidí hacer mi entrenamiento hoy ya que tenía 6 días sin actividad.

Trayecto ida y vuelta desde la Urbanización Iberoamericano hasta el kilómetro 18, justo done está el limite del Distrito Capital con el Estado Vargas.

Me sentí muy bien, con las molestias acostumbradas en la rodilla izquierda y la planta del pie derecho.

Punto resaltante fué la temperatura, alrededor de 15ºC y con trayectos de viento en contra.
Mucho frío. Las manos y las rodillas se entumecen. Poco a poco fue saliendo el sol y con el una temperatura mas agradable para terminar el trayecto.

A Nightmare to remember..

El objetivo de mi blog no es otro que reseñar mis encuentros y desencuentros con mi entrenamiento de carreras de calle. Sin embargo, es una obligación relatar porque una semana después de mi último rodaje no he vuelto a patear el asfalto.

El día martes inicié un viaje Puerto Ordaz-Clarines-Caracas para hacer algunas negligencias, digo, diligencias. La principal diligencia fué el concierto de Dream Theater en la terraza del CCT correspondiente a su gira Black Clouds and Silver Linnings Tour.

Excelente espectáculo, dentro de los parámetros de lo esperado. Algunos problemas de sonido, sobre todo con la voz de LaBrie, pero el resto de la banda pudo exhibir sobresalientemente su virtuosismo.

Lo resaltante de esto, es que bebí varias cervezas antes del concierto y luego estuve parado 4 horas y media en el pre y post concierto. Llegue a mi lugar de alojamiento ubicado en la casa mi amigo el siempre constante y fiel Adolfo a eso de las 1:30 am.

Había que levantarse a la 6 am ya que tenía compromisos con mi esposa en Caracas que insospechadamente me iban a llevar hasta Naiguatá en Vargas.

Al final el día termìnó en el Junquito en casa de mi padrino.

Definitivamente ya no es lo mismo que antes. Ya no puedo estar en un concierto 4 otras parados y no exhibir el gasto al día siguiente. Mucho menos solo dormir 3 horas y salir a manejar por toda Caracas y mas allá.

Necesitaré ahorrar mas y ver mis conciertos de la zona preferencial campaneando un escocés. Ya quedó atrás la época de ollas y muchas espumusas hasta el amanecer, para luego como si nada ir a trabajar o a presentar exámenes.

Ese escocés no posee la emoción de lo vivido en el pasado, pero tienen la sensación de éxito de haber pasado correctamente por cada etapa y salir bien parado de ellas.

domingo, 21 de marzo de 2010

12 Kilómetros

Los 2 kilómetros mas difíciles que me ha tocado correr fueron los dos últimos de mi trayecto de 12 kilómetros del día de hoy. Pero quizá me estoy adelantando en la historia...

Me levante muy temprano (4:45 am) para iniciar mi rutina de hidratación, aseo y estiramientos. Escogí una camisa clara, el short de siempre, par de medias casi nuevas, zapatos con el nudo hecho, Ipod, crema para las rozaduras, dinero, llaves y celular.

Terminé los estiramientos y tomé mi vehículo rumbo a la llovizna, donde empezaría mi recorrido. Al llegar a la llovizna unos últimos estiramientos y listos para hacer andar el reloj.. El reloj, EL RELOJ. Que riñones, dejé el reloj. Tanto pararme temprano organizar todo para dejar algo tan importante. Ni modo al bajarme del carro eran las 6:06 así que asumí las 6:10 como hora de inicio para la ruta global, sin embargo sin poder cuantificar el rendimiento kilómetro a kilómetro.

Mi plan inicial era correr los primeros 7 kms muy conservadoramente y luego aumentar un poco a mi ritmo de carrera de 10K. Los primero 3 kms me fue muy bien. Sin embargo, me costó mantener el ritmo ya que mientras uno se va calentando naturalmente aumenta el ritmo.

Al lllegar a los primeros 6 kms me sentía muy bien, a partir de allí empezarían las molestias. empecé a sentir dolor en el talón y la planta del pie, y unos leves conatos de calambres en pantorrilas y abductores.

Hasta el km 8 el trayecto es de bajada por lo que fui muy cuidadosamente y con mucha concentración. En varios momentos cerré los ojos varios metros sintiendo alivio y una sensación de paz dificil de describir. Claro a todas estas en el Ipod sonaba "Lines in the Sand" de Dream Theater, quizá un poco contradictorio.

Llegué al kilometro 10 en buena forma ya acusando cansancio y creo que dentro de mis tiempos en esa distancia. A partir de allí fue un poco terrible, mi cuerpo estaba como un avión en picada sonando muchas alarmas por todas partes. Allí es donde aparecen voces de donde uno no se imagina. "para" "ya está bueno" "Si hubieses corrido 10K ya hubieses terminado" Es fácil ignorar esas voces, lo que no resulta a veces muy bien es convencer a las piernas cuando ya no quieren seguir mas. Las ganas de detenerse a falta de solo 600 metros para terminar son irresistibles.

Hay que ser fuerte, hay que vencer al cuerpo y a la mente. Detenerse en ese momento es enseñar al cuerpo y al cerebro que existen vías y salidas fáciles al esfuerzo físico. Terminar la ruta es una satisfacción egoista, pero estoy convencido que es una de las mas puras que hay.

Si no fuese así y no hubiese la suficiente fuerza de voluntad para terminar, ese Papelóntorade en el cafetín de La Llovizna no tuviese ese dulce y refrescante sabor a victoria.